martes, 8 de abril de 2014

284.- EL HOMBRE MEXICANO Y EL CABALLO

ESTUDIOS PARA EL BOSQUEJO DE UNA PINTURA DE CABALLOS Y EL CHARRRO MEXICANO

  Nunca jamás he pintado un cuadro, sin embargo  mi estimado amigo Felipe Nuño que está construyendo una casa  moderna y contemporánea  me ha dado la oportunidad de realizar algunos garabatos, por ello tengo que realizar  unos sencillos estudios  sobre los caballos que es el tema de la pintura que se pretende en la sala, naturalmente que no lo lograré per o quizá haya un poco más de claridad sobre lo que se necesita o de lo que se puede hacer, siendo que la casa se edifica en Huentitán el Alto, un poblado hasta hace poco rural y de paisajes campiranos coronado por la Barranca del mismo nombre , dicho pueblo fue testigo de los  mesones, de los  arrieros,  de las antiguas haciendas algunas de ellas ganaderas  y de gran parte de aquellos elementos que forjaron el Charro Mexicano,  la identidad del hombre ligada al caballo.

   Este sencillo estudio que nos hace entender un poco el “Mesón Digital del Arte, por los caminos del arte y la cultura de Jalisco” que es una sección inicial de Periodistas Digitales de Jalisco , con ello descubrimos  esos tesoros y maravillas de nuestra tierra , para esto hacemos un sencillo estudio de los caballos pintados por Orozco, por Jorge González Camarena, hacemos  referencia  a los  caballos descrito en la novela “Pedro Páramo” de Juan Rulfo, vemos  la escultura “La Estampida” de Jorge  de la Peña, abordamos brevemente los caballos y las suertes de la charrería y finalmente abordamos una de las pinturas de Lala Trewick.  Todos ellos nos muestran luces particulares  proyectadas desde la pintura, literatura y escultura  que nos hacen recorre esos viejos caminos  históricos en los que se hunden nuestras raíces, nuestro ser, el Arriero Histórico como hemos aprendido de nuestro compañero Javier Medina Loera  en sus interesantes temas sobre la Arriería.

JOSÉ  CLEMENTE OROZCO.-   Vemos en la pintura de Orozco los caballos montados por los conquistadores  envueltos en armaduras de fierro, el caballo y el conquistador  cruel y sanguinario, una imagen fantástica casi mitológica, el caballo tiene dos cabezas y es inseparable del hombre, se mira imponente, majestuoso, esto proyecta a un hombre dominante que arroja fuego, destrucción , el caballo participa de esa destrucción, la destrucción de toda una cultura y la civilización prehispánica, una memoria de conquista donde el caballo fue fundamental y determinó luego las haciendas  ganaderas que eran propiedad de los propios  conquistadores.

JORGE GONZÁLEZ CAMARENA.-  En los caballos de González Camarena  tiene gran parecido con los caballos de Orozco , pero más coloridos y expresivos como lo podemos ver , el caballo está en medio del combate entre dos culturas, es un momento trágico, de destrucción, agonía y muerte, el caballo en medio de la guerra , de la lucha del hombre contra el hombre, esa imagen de combate y lucha hace irradiar esa expresividad, ese espectáculo de la muerte, de la violencia y de la sangre, se pierde por ello la composición y simetría de los  cuerpos, particularmente del caballo, el fuego, la sangre, el atardecer trágico o fin de una cultura, la expresión es terrible, vemos la fuerza del color y de  la sangre, un caballo desbocado, la expresión misma de la agonía, eso hace la fuerza de la pintura, de su composición y de sus colores.

“PEDRO PÁRAMO” DE JUAN RULFO.- Este tema ya lo he abordado en el blog de su servidor, por  lo tanto hare solo una descripción muy breve, vemos  sobre todo el caballo del Hijo del cacique, es el caballo de Miguel Páramo que termina por matarlo, es la relación entre el caballo, el hacendado y el heredero, el caballo permite el control ,  el dominio y continuidad de su territorio y gobierno, por ello la muerte del heredero por el caballo es en sí mismo fatal y trágico  como es la característica elemental de la novela, eso lo vemos  como una especie de venganza  ya que a los indígenas por mucho tiempo no se les permitió montar a caballo, por ello el charro se apropia de eso que era solo para el patrón , el caballo se vuelve entonces un ser en pena al igual que las ánimas y fantasmas  de cómala, un caballo en medio de las sombras y de la débil  luz de la luna o Media Luna, si vemos  en este es un caballo que se pierde su figura en la noche y en su propio remordimiento o pena, polvo, diríamos  que es un caballo esquelético, muerto, la literatura nos permite pintar  o más bien bosquejar un caballo apenas perceptible confundido con la neblina y cobijado por la noche, por lo tanto no sería un caballo expresivo , lleno de fuerza y de color sino todo lo contrario, el caballo se suma a la tragedia,  envuelto en su culpa, el caballo sin jinete, es un caballo de desolación y abatimiento como si marcara el fin no solo de los pueblos rurales  sino también de lo que fue la era e imperio  del caballo, el caballo en el mundo moderno ha dejado de tener importancia, el caballo al perder la rienda vaga perdido , sin rumbo, no en la libertad  sino extraviado, el caballo es también un fantasma, transparente que corre por las calles desoladas de Comala, sombras y oscuridad, el color negro, la penumbra, la negación de la luz que termina en fatalismo y tragedia.

  LOS CHARROS Y EL CABALLO
  El Charro significó la presencia del hombre a caballo , sin hacer una descripción histórica del Charro en Jalisco  así como de las grandes haciendas ganaderas fundadas desde la misma conquista podemos ver  brevemente el encuentro del hombre  de estas tierras con el caballo y las actividades propias de la ganadería  que dieron luego paso a las suertes charras, la reata en el hombre se vuelve fundamental para la doma del caballo, la fuerza del hombre  y del caballo  donde el hombre termina por dominar a la bestia, se ha domesticado ha perdido esa fuerza y expresiones de libertad, se ha amansado, se ha vuelto dócil el caballo , el caballo ha sido vencido, la rienda, la cuarta, las espuelas  serán su violento dominio, el hombre se ha apropiado de esa fuerza del caballo, sobre el caballo el hombre toma altura, fuerza, velocidad, resistencia y elegancia, se constituye lo que conocemos  como “E Caballero”, esto lo vuelve  un espectáculo como lo es la Charrería donde hace lucir el caballo  a base de golpes , la expresión del caballo es ahora de agitación , violencia ay sufrimiento, el charro es ahora una manifestación meramente irracional, de fuerza que se volvieron un símbolo nacional y una identidad por  la que es reconocido el mexicano ante el mundo, aquí al tratar de representar esto en una pintura tenemos  que entender estas cuestiones , donde la elegancia del charro y del macho no se vuelvan expresiones de fuerza irracional.

ESCULTURA “LA ESTAMPIDA” DE JORGE DE LA PEÑA .- Esta escultura estaba originalmente junto al Hospicio Cabañas , vemos a una manada de caballos en estado salvaje, indomables, que hacen una gran expresión de vida, fuerza y libertad, una expresión total de naturalidad y libertad y eso lo vuelve por sí mismo bella, porque proyecta el gran valor de la libertad, el caballo en los grandes paisajes , una imagen casi del paraíso, en estado natural, primitivo, tenemos  otros elementos ahora de la escultura para tratar de entender los bocetos para una pintura de caballos.

PINTURA DE LALA TREWICK.-
   Hemos visto visiones del hombre, con una interesante pintura de Lala Trewick  vemos  una interpretación desde la mujer  que es la que ha sufrido ese falso machismo, en su pintura vemos  la suavidad y el reposo de sus colores, el caballo que vagamente se delinea  parece en el suelo, se ve algo instintivo, natural, orgánico, desde la perspectiva psicológica  parece  una castración, en ella el hombre o “Caballero” pierde su fuerza y expresividad, pierde su carácter, estos aspectos han sido abordados ampliamente en el blog de su servidor , el macho  o charro jalisciense  ha dejado de tener importancia  en los nuevos modelos de sociedad, la inoperatividad de lo campirano  que dominio por siglo y milenios y que prácticamente desparece ante la cultura urbano industrial, en la pintura de Lala Trewick vemos  un acto gestor, un parto y un amamantamiento , se proyectan entonces nuevas concepciones y partos del arte de la pintura gestados por la mujer, nuevas concepciones psicológicas de la pintura, del surrealismo pictórico mexicano, su pintura está llena de ricos significados que es necesario descifrar.

LOS MACHOS CHARROS El macho jalisciense hunde sus raíces en los paisajes campiranos, en la vida rural que tejen finalmente al charro elegantemente vestido, esto es una expresión natural, instintiva, casi salvaje del hombre, rodeado de animales y de brutos, irracionales, donde impera solo la fuerza, los machos en el mundo animal muestran una gran violencia, lo vemos por ejemplo en los gallos y los toros que da lugar en la cultura mexicana a sangrientos espectáculos, el hombre arriba del caballo multiplica su altura, fuerza y velocidad, se siente un súper macho que en las artes de la charrería demuestra esa fuerza al lazar, tumbar, herrar y castrar a toros y caballos, trae la rienda y las espuelas y se acompaña de una reluciente pistolita, el gesto fiero y amenazante de su sus grandes bigotes, “Desgraciada la casa donde canta la gallina” dicen sus refranes que son por lo regular la única escuela que recibe, y si el gallo canta en las madrugadas él ha de ser también un charro cantor en el Rancho Grande de Jorge Negrete, el caballero gallardo que enamora a todas las mujeres de la comarca. El cine formó en gran parte esa imagen del macho mexicano, su época de oro, como luego la televisión con las telenovelas terminó y se mofó de ese machismo y difundió la nueva cultura de la mujer moderna y liberal, todo ello es cultura y enajenación de masas manipulados por los medios masivos de comunicación que tiene graves errores y distorsiones, creo que la utilización de las nuevas tecnologías podrán democratizar los medios y tener una visión más clara de la cultura mexicana. El cine mexicano difundió ese machismo reafirmado luego con las canciones donde la mujer es un simple objeto y no es tratada como un ser humano, la cultura milenaria ha considerado siempre a la mujer como inferior, como débil, dependiente, sujeta a la voluntad del hombre que toma mayor fuerza en la cultura mexicana por lo antes expresado sobre el macho charro, aspectos acuñados en las tierras de Jalisco, en esta escuela del cine y los cantantes charros se mira con agrado y se celebra que el hombre ande con muchas mujeres, que cometa adulterio e infidelidad, en cambio si la mujer llega a perder su virginidad, o comete adulterio o es infiel es duramente castigada, la ley es muy tolerable con los hombre e implacable con las mujeres, en las propias canciones como en las de José Alfredo Jiménez el hombre se vuelve rey y ley absoluta y la mujer es un objeto que se mueve al antojo del hombre. Lo anterior lo podemos resumir según las interesantes tesis de Felipe Nuño, en primer lugar el cine difundió el falso macho charro en perjuicio de la mujer y luego las telenovelas crearon a una súper mujer, una femenicracia que se daña a sí misma y se vuelve contra el hombre, vemos en muchos casos la masculinización de la mujer, esto explica en gran parte los problemas familiares y sociales, ya que el cine y la televisión se toman como escuelas y fuente y referente de valores, modelos de conducta y estilos de vida, lamentablemente equivocados

 LA “FRIDA” JAILISCIENSE.- En lo anterior hemos visto algunos aspectos forjados por el cine y las telenovelas sobre la cultura mexicana que han plasmado los modelos del hombre y la mujer según sus intereses, esto es para de la cultura popular o de las masas que se vuelven aspectos folklóricos y turísticos pero que proyectan visiones falsas sobre el mexicano, ante esto toca al arte clarificar estos aspectos, específicamente la pintura a quien la vemos como una expresión de luz, de liberación y revolución, el arte permite crear y recrear al hombre y tener por lo mismo una percepción más clara y verdadera del mismo, por ello si vemos que el cine a forjado el machismo jalisciense decimos entonces que el arte como es la pintura ha de crear la autentica mujer jalisciense, en esto vemos que la mujer ya no es un objeto o modelo del pintor sino que ella misma es productora de arte, esa imagen del charro anclada al pasado ha perjudicado gravemente nuestro desarrollo y por otra son modelos obsoletos e inoperantes para las culturas urbano industriales en las que estamos envueltos, esto es lo que hemos aprendido de la pintora tapatía Lala Trewick.
 LA ANTROPOLOGÍA MEXICANA La antropología mexicana tiene ante sí un extraordinario reto: Replantear la naturaleza y misión del hombre y la mujer mexicana en el mundo de ahora, en la sociedad urbano industrial, ante la nueva cultura de la mujer, aquel concepto del macho charro es cosa del pasado, la “Frida” jalisciense busca la presencia de la mujer en: La pintura, arquitectura, danza, teatro, música, su realización profesional. Se han modificado los conceptos del hogar, de los hijos, de la educación y plantea una gama de complejos problemas para la mujer entre su realización como madre, los hijos y el hogar y como trabajadora o profesionista, y al mismo tiempo el hombre ve cada vez menos claro su tarea, misión y responsabilidad ante una mujer cada vez más libre y autosuficiente que necesita cada vez menos del hombre y esto causa gravísimos problemas en los matrimonios. Ante la libertad de la mujer difundidos inicialmente por las telenovelas consideran ahora a la maternidad, el hogar y el matrimonio como cosas anticuadas y formas pasadas de esclavitud que han tenido atadas a la mujer por siglos, por ello ante la revolución sexual considera las relaciones sexuales con mucha facilidad sin ningún compromiso y responsabilidad y esto le ocasiona graves perjuicios, si consideramos por ejemplo el problema de las madres solteras en Guadalajara, por lo tanto el hombre como la mujer mexicana hemos de replantear con profundidad nuestra y naturaleza y misión pues hay graves equivocaciones y distorsiones, no podemos clarificarlas en base a los criterios de las películas de charros brabucones y enamorados o las serie te telenovelas sino conforme a la verdad y la justicia. Necesitamos ante este nuevo milenio y siglo revalorar y purificar la cultura mexicana, esa es la tarea urgente de la antropología mexicana, del periodismo postmoderno.
SENTIDO SOCIAL Y ANTROPOLOGICO DE LA PINTURA

    En este breve resumen que es un sencillo estudio para una pintura  necesitamos  comprender qué es lo que queremos representar  y a qué debe de responder estos garabatos de su servidor, es una respuesta al hombre y a los tiempos, a los  problemas y desafíos  de la sociedad de ahora, particularmente la vocación y misión del hombre ante una nueva cultura de la mujer  que está tomando nuevos roles  y ha modificado el concepto de la familia, del hogar, de los hijos, del trabajo y tales situaciones  han creado complejos conflictos  al hombre, , es por ello el propósito de tratar de clarificar  tales situaciones,  vemos en esto la misión social y antropológica de la pintura, es decir la pintura ayuda a interpretar y resolver problemas sociales , los  problemas existenciales del hombre, con ello se humaniza y socializa la pintura y no es un ocio o recreo, las artes humanizan a la sociedad, la curan y la sanan, realmente una noble y admirable misión muchas veces  o mejo dicho la mayoría de las veces mal comprendida y desvalorada, la construcción del Museo de Arte Moderno y Contemporáneo junto a la Barranca definirá sin duda nuevas épocas de la pintura y de la crítica pictórica en Guadalajara.

                             Juan Ángel Peña Enríquez