199.- FILOSOFÍA MEXICANA DE LA INFORMACIÓN Y COMUNICACIÓN

199.-FILOSOFÍA MEXICANA

DE LA INFORMACIÓN Y COMUNICACIÓN

www entonces existo

  Parafraseamos a Descartes que decía: “Pienso luego existo” ahora se dice: Estoy conectado a la red o la web entonces existo, estoy en la Nube,   entonces puedo ser percibido, vemos en esto el racionalismo existencial, el pensamiento como constructor de la realidad humana, la razón como factor humanizador y principio de la realidad.

  Hoy con la Nube y la Web tenemos nuevos mundos y realidades virtuales y el hombre se aleja cada vez más de la realidad real y natura, del principio mismo de la razón  y de la verdad y se adentra glorioso a mundos ilusorios en pantallas de plasma, la Filosofía Postmoderna Mexicana  debe partir de este principio elemental: Los mundos y las realidades virtuales, si mi rostro no está  en facebook y las redes sociales entonces tengo angustias y problemas existenciales, esta es la nueva psicología y las nuevas generaciones  y sociedades, las nuevas enfermedades mentales, los nuevos elogios a la locura. Falta de razón o irracionalidad del mundo de ahora según las tesis de Felipe Nuño. 

  La Web, la Nube está planteando el nuevo orden mundial  mediante el poder de las nuevas tecnologías de la información y comunicación, son los Nuevos Amos, las grandes centrales, matrices o terminales  a donde llegan tus correos y tus conversaciones donde son procesadas y analizadas y dado  su interés reenviadas a las centrales de inteligencia, las Centrales de Inteligencia y de la Razón según Snowden, las Agencias de Inteligencia como destino final de las supercarreteras de la información, los puertos en los mares de la información que controlan el tráfico y el comercio mundial, la lógica simbólica aplicada en los circuitos electrónicos que procesan datos a la velocidad de la luz tienen por destino final  las Centrales de Inteligencia policiaca y militar que velan celosamente cada uno de tus pasos y de tus palabras  cuidando tu “libertad” y tú “seguridad”

  Las grandes centrales, matrices o terminales de donde se origina el nuevo orden mundial, las nuevas formas de organización y convivencias de la sociedad y desde donde se abona o fecundan  las “Primaveras” según los intereses geopolíticos estratégicos, el nuevo control mediante el valor de la información, en esto hemos de poner una profunda atención y una dedicación sistemática y ha de ser el principio básico  de la Filosofía Postmoderna Mexicana  particularmente Tapatía donde están las grandes empresas de la electrónica y en la que somos tan solo simples maquiladores.  Hemos de capacitarnos con gran habilidad para navegar en estos mundos y realidades virtuales, mediar y calcular sus alcances y profundidades, sus tendencias, planes y objetivos, aplicar la lógica a ideologizar esos canales y centrales que son rectores y motores de estos nuevos mundos y sociedades, en ello hemos de ver la razón, el pensamiento, el conocimiento promovidos por estas nuevas tecnologías.

  Estos Puertos y Supercarreteras de la información, estos mares de la información  en los que hemos de navegar plenamente orientados en el tiempo y el espacio, distinguiendo claramente esos referentes y coordenadas de la realidad y de la razón y por otro lado los mundos y realidades virtuales  que  están cambiando profunda y aceleradamente naciones, familias, individuos y en la que podemos hacer poco o nuestros esfuerzos resultan inútiles ante estos nuevos poderes.

  Necesitamos nueves Escuelas  para crear los instrumentos y los lenguajes necesarios para calcular, realizar operaciones y ecuaciones que nos hagan comprender la forma en que trabajan estas centrales de la información y la comunicación, cuáles son sus planes y sus objetivos, sus estrategias y programas a corto, mediano y largo plazo de estas grandes compañías que tienen como matriz el Valle del silicio en California y de ahí las Agencias de Inteligencia.

  Hemos de crear para ello modelos interpretativos, planos generales y proyectos específicos para entender esa nueva realidad  y mundos virtuales, el nuevo tráfico y orden mundial,  ver sus implicaciones teológicas, filosóficas, psicológicas y sociológicas, no es propiamente una filosofía del lenguaje como la entendemos tradicionalmente  sino una filosofía de la información y comunicación pragmática y objetiva , las nuevas generaciones de hombres y sociedades gestados en las redes de fibra óptica del internet y la telefonía celular, estos capullos electrónicos de admirables y profundas metamorfosis antropológicas,  los nuevos niños educados en los videojuegos y las tabletas, los nuevos procesos del aprendizaje y el conocimiento , los nuevos modelos educativos y las Nuevas Universidades  ante esta Revolución de la Información y la Comunicación.

  El conocimiento, el pensamiento, la razón, la realidad y la verdad  transformados  continuamente por estas novedosas tecnologías.

  Según el periódico The  Washington Post, las 16 agencias de espionaje de los Estados Unidos que realizan labores de “Inteligencia” tienen  para este años un presupuesto de 52 mil 600 millones  de dólares, sumemos a esto los programas  de inteligencia militar   del Pentágono con 23 mil millones de dólares, la Agencia Central de Inteligencia  busca un presupuesto de 14 mil 700 millones de dólares, la Agencia de Seguridad Nacional con 10 mil 5000 millones,  según  The Washington Post. Con lo anterior podemos ver la gran capacidad operativa, los cientos de mieles de agentes, instalaciones e infraestructura, la importancia del control total de las terminales del internet y de toda forma de comunicación como es el teléfono celular, el espionaje sistemático a líderes sociales, políticos, empresas embajadas, investigadores, industriales, industrias estratégicas,  redes sociales, ladres religiosos,  Etcétera. Vemos la importancia y el valor de información privilegiada y estratégica que permite determinar planes políticos, comerciales,  económicos y militares.  Desde esto se plantea la “Inteligencia y la “Razón”, realidades y mundos virtuales, globalizaciones, nuevo orden mundial, nuevas sociedades y nuevos hombres, es decir los principios elementales de la Filosofía Postmoderna Mexicana

                                   Juan Ángel Peña Enríquez