EL MURO DE
TRUMP
Y EL DERRUMBE DE LOS
ESTADOS UNIDOS
Estados Unidos fue edificado particularmente
desde la primera Guerra Mundial, sus grandes industrias, sus ferrocarriles, sus
carreteras, sus grandes puentes, su poder militar, sus grandes edificios, sus
colosales monumentos, sus empresas trasnacionales, sus barcos que cruzaban
todos los mares y sus cohetes que llegaron a la luna, sus grandes producciones
de Hoolywood, la era digital que supuestamente construía sin fronteras la aldea global, sus prestigiadas universidades, etc. Y todo ello y más construyó a la nación más
poderosa de la tierra.
Una figura colosal en la que México es solo
polvo. Desde la conquista y la colonia
el mexicano perdió su rumbo histórico y
su identidad, 300 años de esclavitud dejaron profundas cicatrices
que desfiguraron esa imagen
del mexicano, acostumbrado a una vida
dura, de desprecios, trágica, de inferioridad, etc. ni la Independencia ni la Revolución Mexicana
pudieron reconstruir ese ser del
mexicano.
México enfrentaba la Revolución mexicana y Estados
Unidos ya un país altamente industrializado enfrentaba la primera Guerra Mundial.
México bajo el peso de este colosal
imperio fue reduciéndose cada vez a la nada, a no ser
nada ni nadie por sí mismo, México vale en la medida que su vecino lo haga
valer, bajo su sombra murió y sepultó todo anhelo de que México tuviera por un
momento esa libertad y dignidad de ser
el mismo , dependemos total y absolutamente de los Estados Unidos, con esa idea
del vecino supremo y todo poderoso forzamos nuestro ser a ser los fieles
sirvientes, el esclavo dócil, el criado
junto a los píes de su descomunal patrón, la mano barata y abundante,
infantil, sin representar jamás un
peligro, la compasión al criado, el peón de los campos en los trabajos más duros, los obreros que
mueven sus fábricas, mexicanos sin rostro, sin identidad, sin vida.
Estados
Unidos, con su poder destruyó todo
aquello que México necesitaba para ser una nación libre y digna, trituró sus fábricas, el comercio, desmanteló mediante
una competencia desleal la industria, quebraron talleres, se importaron indiscriminadamente
mercancías e impusieron nuevas formas de consumo, de diversión y entretenimiento
y se ridiculizó la rica cultura mexicana, sus tradiciones y costumbres , el
mexicano consumo todo lo americano, su economía depende de las trasnacionales
de Estados Unidos que disponen a su antojo de todo, de materias primas
regaladas y mano barata y abundante , de leyes que protegen sus productos y sus
intereses, con ello los mexicanos nos relacionamos conforme a los valores y
principios de la moda norteamericana..
Trump con sus concursos de bella de miss universo y los modelos de Hollywood exaltó la belleza
de la mujer norteamericana y México es
el mayor consumidor de pintura rubia para el pelo, la mujer mexicana siente vergüenza de su propio color de piel,
hoy la mujer mexicana tendrá que comprender que no es bien vista por los
norteamericanos.
Todo este mundo feliz de Disney y del sueño fantástico americano, la colosal
estatua de la Libertad se derrumba, es el
derrumbe de Estados Unidos que culpa ante todo a los mexicanos de sus
desgracias.
La estatua de la Libertad era el símbolo de
Estados Unidos, columna o eje rector de su modelo liberal o neo liberal. Estados
Unidos se construyó a partir de esa libertad
de ser formado por distintos pueblos, lenguas y naciones y era eso su
fortaleza, la libertad de razas, lenguas y credos, la libertad del comercio, de
la libre empresa, de las trasnacionales, la libertad sexual, etc.
Cada piedra y cada bloque que ponga Trump (como promesa primordial de su campaña) en su monumental Muro es un gran bloque que se derrumba de Estados
Unido y cada piedra y cada bloque que se ponga al Muro de Trump México se irá
reconstruyendo, México no pierde nada porque nada tiene y Estados Unidos pierde todo. La estructura de Estados Unidos se desquebraja
con Trump, se rasga su unidad nacional
lograda después de siglos y que constituye su riqueza, con Trump se
polariza la sociedad norteamericana y se retrocede históricamente a épocas
oscuras del lamentable racismo, Estados
Unidos ya no es el ejemplo de la libertad
y la tolerancia, del progreso y desarrollo, el enemigo de Estados Unidos no
está afuera sino dentro de ellos mismo.
Para despertar ese odio racial iniciado con Trump y justificarlo hay que buscar culpables y los
ha encontrado en los mexicanos, en sus peones, sirvientes, esclavos y criados.
Estados Unidos que desarrollo su poderosa
industria y la alta tecnología culpa ahora a los esclavos y sirvientes mexicanos de ser la causa de su desgracia,
ese grandiosos Estados Unidos que pudo llegar a la Luna superando las
distancias siderales para conquistar otros mundos construye ahora murallas para
separarse del mundo, ese grandioso Estados Unidos que con la era digital decía
construir la aldea global sin lengua sin fronteras y construye las grandes
murallas de siglos pasados.
Inglaterra y Estados Unidos han dado fin a
los principios elementales del neoliberalismo, de la libre empresa y el libre de
mercado, de las trasnacionales y buscarán juntos disolver todo tipo de unión
internacional particularmente la Unión Europea, juntos Inglaterra y Estados Unidos
buscarán socavar la Unión Europea.
Ante la Unión Europea un día con Obama
pensamos en una Unión Latinoamericana para hacer frente a la Unión Europea, pero
vemos hoy que México o Latinoamérica jamás será siquiera pensado como una
posible alianza, hoy más que nunca es necesario y urgente el acercamiento primeramente entre Latinoamérica y después
alianzas y acuerdos de cooperación con la Unión Europea, el Papa
Latinoamericana, el Papa Francisco nos invita a reflexionar con profundidad sobre
ese Muro, hoy Latinoamérica entiende que no habrá acuerdos ni cooperación con Norteamérica.
Por primera vez después de 100 años México ha
comprendido con Trump que no puede vivir a la sombra de este gigante, que tiene
que construir sus propios caminos y construir su propia historia por muy difícil y dolorosa que sea.
Dicen que los mexicanos somos la causa de sus
males y eso es una idea no de Trump sino
de millones de norteamericanos, que ahora tendrán que hacer los trabajos que
hacían los mexicanos, son graves
acusaciones que nos hacen culpables de
delitos y hacen como castigo un Muro como
si fuera una cárcel para los mexicanos y en ese castigo hemos de pagar ese
muro, es esto un gravísima injusticia y una acusación extremadamente grave, por
ello apelamos a toda forma de derecho internacional, a los filósofos, ideólogos
y teólogos del mundo para enfrentar este juicio y esta demanda de Estados
Unidos contra México, la nación más poderosa de la tierra ejerciendo todo su
poder contra un país del tercer mundo, iniciamos este juicio internacional en
que las naciones del mundo no pueden ser indiferentes ante este atropello y atentado contra el derecho y la libertad
internacional , ante esta irracionalidad norteamericana hemos de responder
conforme a la justicia y al derecho, llevemos nuestro caso ante instancias
internacionales y sean las naciones del mundo testigos de este injusto proceso
en contra de los mexicanos.
Juan Ángel Peña Enríquez
No hay comentarios:
Publicar un comentario