OJOS TAPATÍOS
Apagón ilógico analógico
Ojos Tapatíos de
Francisco Peña tratando de clarificar el periodismo digital tapatío nos
presenta ahora el Apagón Ilógico Analógico, un sencillo tema que nos hace
reflexionar sobre el imperio de la televisión mexicana y los supuestos cambios
con el regalo de millones de televisiones digitales en un año electoral.
Ojos Tapatíos que se abren a la
resplandeciente era digital que
muestra algunas de las formas en que han
sido cegados, dañados por la televisión
de la poderosa empresa Televisa.
El periodismo digital que hace uso creativo de
las nuevas tecnologías como son
animación, producción, edición que se difunden por los canales independientes,
alternos y paralelos de las redes sociales. Si bien son incipientes sin embargo
pueden llegar a superar a las televisoras
tradicionales, esto obliga a la capacitación, socialización y
democratización de los medios de comunicación oficiales.
Televisa se presenta como “El Canal de las Estrellas”
algo celeste y angelical, como resplandor divino, sus personajes aparentan una gran inocencia y
son niños que nunca crecen como es el caso de Chavelo, el Chavo del 8, Eugenio
Derbez, Etcétera. Son como ángeles de la guarda que alcanza en el Teletón esa piedad casi divina.
Ellos llevan por una venta de nubes a su “cielo”
a su “sol” y “estrellas” según nos los presenta Francisco Peña, dan la alegría
y la felicidad y según las palabras de sus propios dueños ellos entretienen al
jodido para que no sienta el sufrimiento y la explotación, ellos suplen esa
realidad de marginación, pobreza e ignorancia, suplen esa realidad por algo ficticio.
No son entonces seres angelicales o
celestiales sino verdaderos diablos que
han hecho de México un infierno mediante la cultura de la violencia y de la
muerte, han destruido familias, hombres, distorsiona y mata las mentes,
extermina de forma brutal la unidad y la solidaridad social, siembran la apatía y la desmoralización, el
hombre ante el televisor se vuelve insensible ante el dolor y sufrimiento de
los sectores más desprotegidos, ellos han enajenado y manipulado a la sociedad,
atacado y distorsionado los movimientos
sociales, ignoradas y asilenciadas los reclamos de justicia, hoy México está en
llamas y es fruto de toda una generación de la televisión que siembra en sus
programas esa violencia, corrupción e insensibilidad, han callado y condenado
las voces que pedían atención ante los problemas que destina a millones de mexicanos al hambre
y la miseria mientras unos cuantos viven en la riqueza y la opulencia, con sus
programas de noticias manipularon a su antojo y según sus intereses los
acontecimientos sociales y políticos hasta que México se cansó de ellos, de su
infierno.
La televisión, Televisa destruyó todo el
trabajo de la educación para implantar escala de valores que tienen por
principio la necedad y la estupidez, hoy los jóvenes normalistas y
universitarias dada la gran desgracia de Guerrero se han cansado de esta descarada
manipulación y esperan que el regalo de millones de televisiones digitales en
un año electoral no sea otro de los recursos para cegar a los mexicanos ante su
realidad de dolor y sufrimiento, para no ver a México sino en una ventana ficticia
de la televisión vivir y soñar de un mundo falso e ilusorio, a ello se han de
abrir Ojos Tapatíos, a mirar de nueva
forma los acontecimientos políticos y sociales, a buscar esa luz de verdad y de
justicia a la que aspiran hoy como nunca tantos mexicanos: ¡Ya basta de esta
televisión infernal!, que el apagón analógico sea el apagón del modelo de
Televisa y sea en verdad una nueva esperanza para tantos mexicanos que piden a
gritos verdad y justicia.
La era digital, las redes sociales, las
nuevas tecnologías abren nuevas esperanzas por construir una mejor sociedad,
Ojos Tapatíos tiene una gran misión y
responsabilidad, tratar de encontrar nuevas formas de expresión de información
y comunicación, una nueva era del periodismo.
Francisco Peña Enríquez
Juan Ángel Peña Enríquez
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