miércoles, 7 de noviembre de 2012

111.Conciencia Pública. La Constitución del Periodismo Pos Moderno

CONCIENCIA PÚBLICA
LA CONSTITUCIÓN
DEL PERIODISMO POS MODERNO

     Tratemos de explicar un poco la pequeña barca del hombre  que se adentra a navegar en el mar infinito de su imaginación.
  Lo anterior tiene  profundos alcances históricos y teológicos, para el periodismo pos moderno presentado desde Conciencia Pública,   trataremos de descifrar lo anterior a partir de un modelo geométrico:  partimos de una esfera, su centro y sus hemisferios  y meridianos, un punto fijo fuera de la esfera que es la Estrella  Polar, esto es lo primero que todo marinero debe saber, su capacidad para orientarse en medio del mar, de otro modo se pierde y hunde en el mar de la información, los trazos geométricos, el compas y la regla que marcan rumbos, naturalmente que la esfera es la tierra, vemos la estrella polar y el movimiento de la tierra sobre su propio eje, luego el movimiento de traslación , la trayectoria de la tierra girando en torno al sol, tenemos ahora el año solar, tiempo-espacio, este concepto de tiempo-espacio real nos permite orientarnos en el tiempo-espacio virtual, de otra manera el tiempo-espacio virtual nos crea un espejismo  y cantos de sirenas  que nos llevan a la perdición, la geometría se ha transformado en geografía, los meridianos en continentes separados por los océanos, el tiempo mueve ahora los engranajes de la  historia, podemos navegar hacia adelante o hacia atrás en el tiempo, a partir de este modelo geométrico matemático podemos interpretar el proceso histórico de las lenguas del nuevo y el viejo mundo, la destrucción y el mestizaje de la lengua mexicana.

   En otros ensayos de su servidor veíamos la importancia del caballo en la conquista española, de ahí se deriva la palabra “Caballero”, los indígenas pensaban que el caballo y el hombre era un solo ser, Orozco los pinta con dos cabezas y en la novela de Pedro Páramo analizamos la muerte de su hijo provocado por el caballo al igual que la muerte de Pedro de Alvarado, los orígenes mismos de la Charrería, en la página anterior hemos visto otro aspecto fundamental de la conquista: Los Barcos, los grandes barcos de los conquistadores, esos barcos ahora reconstruidos por los Romanceros frente a las insignificantes canoas o barquillas de los indígenas, eso a pesar que la gran ciudad México Tenochtitlán estaba en medio de una gran laguna o Lago de Texcoco , esta ciudad se conectaba a tierra tan solo con cuatro calzadas o puentes, la ciudad era una isla fantástica, Cortés hace construir barcos y es la forma que destruye la arquitectura mexicana y la lengua, la memoria  y la historia.

  Con la llegada de los grandes barcos conquistadores con espadas, armaduras y cañones, llegan también los Romanceros que tienen por misión destruir la lengua mexicana, saquean los tesoros, roban, esclavizan, matan.
  En esto vemos la intención del Premio de Lenguas Romances, es decir cuando le quitan el nombre de Juan Rulfo, buscan internacionalizar la Feria, particularmente impactar a Europa con países como Francia, Portugal, Italia y naturalmente la madre patria España, es buscar las raíces y orígenes de nuestra lengua en los países europeos no en las tierras de América, es volver hacia el pasado de los conquistadores reciclando armaduras, espadas y cañones, es la conquista de la lengua, por eso el Barco de los Romanceros es en realidad un barco pirata, un barco que roba y mata la palabra, es reciclar la conquista de América, los Romanceros viven como bohemios principalmente en Paris, Roma Madrid, Portugal donde los ordenan como caballeros, marqueses, duques y príncipes, ellos reproducen en sus novelas los paisajes y costumbres parisinas.

 Hay en esta Primera Evangelización algunas cuestiones teológicas para entender los alcances del periodismo  pos moderno, Evangelio es una palabra que significa Buena Nueva, el Ángel es un mensajero, la Buena Noticia, el evangelista es un comunicador un gran periodista que interpreta y discierne los signos de los tiempos, el desarrollo de los acontecimientos, es de sobra conocidos el dominio del Señor sobre las aguas: Camina sobre el mar, realiza pescas milagrosas, multiplica los pescados, da órdenes al viento y al mar, etc. Un fiel laico  a partir del Concilio Vaticano II debe de ser un experto marinero, un viejo lobo de mar muy colmilludo, conocedor de los mares, de sus profundidades y sus misterios.

  El nuevo milenio y siglo se presentaba anteriormente como un amplio horizonte que alborea, que amanece, nuevas eras y nuevos tiempos, el inmenso mar que son los medios de comunicación, el mar de la información, para navegar en esos mares de la información se necesitan barcos que conozcan el mar, son los periodismo pos modernos, las redes para pescar en esa inmensidad es la palabra tejida, es la palabra hilvanada, ordenada, entonces podremos navegar con cierta seguridad y tranquilidad en los mares virtuales de la información, capitaneados por expertos  navegantes.

  El Periodismo Pos Moderno planteado en Conciencia Pública  necesita Constituirse  a partir de la Declaración de Guadalajara, nace como una Constitución porque un tribunal o jurado  de Lengua  Romances decreta su extinción, esto viola gravísimamente la dignidad y los derechos de los periodistas, esta Declaración es en sí mismo una nueva Constitución Periodística, un nuevo periodismo, el periodismo pos moderno del nuevo siglo y milenio  que nace como una negación o antítesis del juicio de las Lenguas Romances, es decir se está hablando de nuevos lenguajes en los medios de comunicación, nuevas misiones y tareas del periodismo, el rescate de su dignidad y sus derechos, los nuevos mares y mundos en los espacios virtuales, la conquista del lenguaje, la habilidad para manejar las redes digitales, hemos dicho que un buen periodista es ante todo un buen historiador, el periodista hace la historia de cada día, pero esa historia no la interpreta cada día, sino que esa se mira desde su conjunto, entiende  el proceso histórico en el que está inmerso, él es forjador e interpretador de la historia, la historia cotidiana que le permite esquivar el poder de los hombres, ve entonces su responsabilidad social e histórica que hace superar los propios intereses personales o políticos, se vuelve un periodismos antropológico y social, humaniza el periodismo, humaniza el mar de la información,  este modelo geométrico histórico  define el Arte del Periodismo Pos Moderno, el periodista ya no es una sombra de los políticos , ya no vive al lado de los acontecimientos de los hombres famosos y frívolos , ya no es un ser perdido en la propia información,  el periodista es un ser que crea historia y crea arte, es un ser necesario con gran valor y dignidad.

  El Periodismo Pos Moderno ya no maneja o busca información  sino que la interpreta , tiene que procesar y discernir el mar de información en la sociedad de consumo instantánea y desechable, se aleja del el periodismo desechable, hoy más que nunca se necesita esa nueva generación de periodistas , las barcas que navegan sobre los mares de información, estos son los nuevos rumbos de la historia hacia donde Conciencia Pública de Don Gabriel Ibarra se ha arriesgado y aventurado, la aventura es fascinante y maravillosa, pero ahora es amenazada por el Barco de los  Romanceros que es capitaneado por el Pirata Bryce Echenique que se prepara para la batalla y el abordaje, ellos que se han robado las letras y los mundos, son los peligros del mar. Según las propias novelas los piratas traían en su sombrero pintada o bordada una calavera, era la muerte en el mar, es la muerte de las lenguas, la muerte del periodismo tradicional , es la calavera encontrada en las minas  vacías de Andrómeda en Pedro Páramo  de Juan Rulfo , la lengua muerta, solo queda el murmullo, las minas saqueadas,  los tesoros trasladados a España , la pobreza de nuestra lengua, murmullos, ecos, tartamudos, fantasmas, quejidos agónicos, muertos, fue la muerte de Juan Rulfo en la Feria Internacional del Libro para dar paso a los  Romanceros cínicos  y descarados, sinvergüenzas y vulgares.

                                                Juan Ángel Peña Enríquez

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